Esta vez Redes del Misterio se desplaza a la Provincia de Tarragona, para mostraros un lugar en cuya historia se mezclan relatos de injustificada crueldad. Este artículo no se basa en una investigación de campo dentro de la Fenomenología paranormal
Es más un retrato humano de la historia reciente de España. Hablaremos de los Preventorios o Sanatorios organizados para paliar y prevenir enfermedades. En algunos de estos Preventorios podemos hablar de apariciones fantasmales y misterios, en cuanto a muertes, suicidios, sufrimiento y dolor. Entre otros los de Aguas de Busot, Guadarrama, Agramonte, Sierra Espuña, etc. El Preventorio de La Sabinosa es más conocido por su historia de maltratos y duros castigos a los niños internos.
Del Preventorio de la Sabinosa, lo que nos llamó la atención fue la historia de esos niños, hoy en día personas adultas, a quienes sus padres enviaban desde diferentes puntos de España a Tarragona con el fin de prevenir enfermedades torácicas o contagiosas, como podría ser la tuberculosis que, en tiempos de la postguerra Civil Española llegó a ser una epidemia. El Régimen Político que había en España, pretendía mostrar como un logro político el envío de niños y adultos a este tipo de Centros para prevenir contagios de enfermedades infecciosas. Por supuesto y de acuerdo con los dogmas de la época, aplicaban una férrea disciplina a las personas que ingresaban y pasaban largas estancias en estos Centros llamados de “prevención”.
Mucho se cuenta sobre lo que ocurrió entre los muros del Preventorio de La Savinosa a lo largo de varias décadas de uso, comprendidas entre los años 1946 y hasta finales de 1967.
Como es habitual en Redes del Misterio no especulamos, sino que intentamos llegar a las fuentes más veraces y, a lo largo de este artículo, descubriréis que hemos entablado contacto con algunos antiguos internos que se denominan así mismos “los Sabinosos”. También hemos estado físicamente en el Preventorio “la Sabinosa”.
Durante décadas, éste fue el lugar donde generaciones de niños iban de colonias o campamentos a la costa, la mayoría procedentes de Madrid.
Los niños, y sus padres, imaginaban que iban a disfrutar de unas vacaciones junto a la playa (la mayoría no conocían el mar), pero muchos de ellos hablan de sufrimientos y castigos bajo el sol.
Algunos de esos niños cuentan que soportaban una disciplina dura y absurda en la mayoría de los casos, como así lo confirman declaraciones vertidas en algunos medios de comunicación, como en el Diari de Tarragona. Como se puede consultar en su hemeroteca del día 23 de noviembre de 2012.
Hoy intentaremos descubrir los secretos ocultos en las ruinas de La Sabinosa. Escuchando las diferentes versiones, algunas hablan de vacaciones y otras directamente de maltrato.
Preventorio la sabinosa .
Historia
El Preventorio La Sabinosa fue construido en 1929, de acuerdo a los planos del arquitecto Francesc Monravà i Soler. Durante la dictadura del General Primo de Rivera. Se ubica en una pequeña península entre las playas de La Rabassada y La Sabinosa, en Tarragona.
Su arquitectura pertenece a los llamados hospitales “de unidades múltiples” Cada bloque del conjunto tiene solo unos pocos pisos, con cuatro alas principales flanqueando un edificio central.
El Hospital es como un pequeño pueblo, donde uno puede encontrar calles y avenidas, pequeñas plazas, fuentes y pabellones. Se destaca el trazado simétrico, mientras que los alrededores son magníficos y protegidos.
Comenzó su andadura como tal Preventorio en 1946 hasta su cierre en abril de 1967. Durante ese tiempo miles de niños permanecieron internados entre tres y seis meses con el objetivo de prevenir enfermedades.
Eran chicos sanos, de entre 7 y 14 años. Procedían de distintos lugares, llegaban a Tarragona en tren. Los que salían desde Madrid tenían que soportar un viaje de 24 horas en un vagón de tercera clase. Un trayecto que realizaban tumbados en el suelo o hacinados en los bancos de madera. La capacidad del centro era de unos 600 niños cuyo control estaba en manos de cuidadoras, muchas de ellas pertenecientes a la Sección Femenina de la Falange. Por supuesto el Régimen dictatorial de la época, exhibía estos centros como un triunfo.
Los chicos se alojaban en módulos, por status social, el noveno estaba reservado a aquellos de condición social más humilde o a los chicos supuestamente conflictivos. Tal era la situación que, algunos de los niños, fingían alguna dolencia para conseguir mejor alimentación en la enfermería y librarse durante unos días del rancho.
Los niños pensaban que iban a disfrutar de unas vacaciones junto a la playa, pero muchos sólo bajaron a la arena para sufrir castigos bajo el sol. Algunos osados, los más rebeldes, utilizaron la vía de ferrocarril que pasa junto al preventorio para fugarse subidos a un tren. El castigo si los capturaban era ejemplar. Los antiguos internos cuentan historias espeluznantes, incomprensibles hoy en día, secretos ocultos en las ruinas de La Sabinosa.
Investigación de Campo.
A nivel personal conocía el enclave de primera mano, de hecho durante años (años 90) estuve disfrutando de las maravillosas playas que lo envuelven, más de una vez lo visité en su interior, pues es y era entonces un edificio abandonado y ruinoso. Pero sólo me interesé por su historia cuando fundé Redes del Misterio.
Hace un año, a finales del mes de octubre, realizamos un amplio reportaje gráfico, pero sólo a nivel histórico. Pues como ya he comentado en la introducción no es un lugar de muerte, sino de dolor, dolor que me pareció importante descubrir a los seguidores de Redes del Misterio. Indagar y documentarnos sobre ese dolor de niños y adolescentes guiados por una rigurosa disciplina, a veces vejatoria y brutal, ejercida por el autoritarismo de esa época (los que tenemos una cierta edad, sabemos de lo que hablamos, pues se impartía no sólo en estos Centros, sino en todos los Centros de enseñanza del Estado, con un lema:”la letra con sangre entra”).
De esta manera, decidimos realizar una investigación de campo, para que los más jóvenes conocieran un pedacito de historia y también trasladarlo a todos nuestros lectores y seguidores.
La entrada principal, está ubicada al final del actual paseo de la playa, hay una puerta de hierro forjado de grandes dimensiones. Por esta se accede a través de un camino con una arboleda frondosa y que en su época a buen seguro estaría bien cuidada. Esta senda lleva hasta un edificio principal con una gran escalinata central que flanquea la entrada.
Cuando entramos, el abandono y el deterioro de las estancias del edificio es manifiesto a simple vista. Preside esta entrada desde el primer piso, un hueco central que en sus tiempos debió de albergar alguna estatua de tipo religioso.
Hay unos grandes huecos por los que antaño debían de funcionar ascensores o montacargas. A derecha e izquierda de la planta baja hay grandes salas en las cuales los vándalos han realizado numerosas pintadas y destrozos, el sol de octubre entraba en estas estancias vacías y deterioradas.
Fuimos accediendo a las plantas superiores, en total hay cuatro, incluyendo la planta baja. Hay aseos y duchas deterioradas y más panorama desolador. Las escaleras principales están en precario estado de solidez y a punto de derrumbarse por el paso del tiempo, así que subimos de uno en uno con la máxima precaución, hasta llegar al último piso y la terraza.
Desde los pisos superiores, la vista del mar frente al preventorio hace que por un momento te olvides donde estas, pues el paisaje con la arboleda y el mar al frente embriagan los sentidos y una sensación de paz nos envolvía. Bajamos y rodeamos el edificio, en su parte central hay un enorme pasadizo, por el cual se puede pasar bajo el edificio de Este a Oeste.
Abandonamos el edificio central y anduvimos por la extensa parcela visitando el resto de edificios que forman una diáspora en torno al Central. Entre ellos el Pabellón nº 1, la Dirección de Enfermería. Todavía estaban esas puertas verdes con un círculo central que recordaban el acceso a una unidad médica. Algunas estancias todavía conservaban unos pocos restos de mobiliario. También con unas buenas vistas frente al mar. Paseamos por lo que fue el almacén de alimentos o despensa, continuamos recorriendo el resto de edificaciones y sólo encontramos deterioro en todos, en algunos todavía se conservaban resto de ropa de niños “lo que se llamaban babis”.
También nos llamó la atención, por lo bien conservadas que aún están tres fuentes, adosadas a uno de los pabellones y presididas por una gran cruz de Lorena.
A pesar que es una investigación diseñada sólo para transmitir las historias de los malos tratos que sufrieron cientos o miles de niños. Lógicamente, intentamos recabar datos a nivel de parapsicología científica y en ningún momento ninguna de nuestras cámaras, de video ni de fotografía recogieron nada fuera de lo normal, las mediciones electromagnéticas no arrojaron datos fuera del rango normalizado, tampoco los medidores de temperatura, realizamos barridos en todas las estancias y no mostraron alteraciones, incluso dejamos varios detectores volumétricos e infrarrojos y en ningún momento saltaron los avisadores. En definitiva el protocolo común que aplicamos habitualmente para detectar fenomenología de carácter paranormal fue negativo.
Por lo que respecta a Redes del Misterio, en el Preventorio de La Sabinosa el único misterio que cabe contar es el histórico y lo mal que lo pasaron esos niños que, desde mediados de los años 40 hasta su cierre al final de la década de los 60, la mayoría de ellos sufrieron estoicamente el maltrato de sus cuidadores.
A continuación contamos con la colaboración y el testimonio de Scila, uno de aquellos niños y que, en la actualidad, cuenta con un blog en Internet donde recoge testimonios e información de otros niños llamados “los Sabinosos”.
TESTIMONIO REAL DE UN NIÑO SABINOSO.
La red de Preventorios tengo entendido que surge en plena postguerra, utilizando en ocasiones instalaciones previamente dedicadas a uso hospitalario, o lazaretos y prisiones provisionales que duraron años, o actividades similares. Y surge como solución urgente y barata para atajar posibles pandemias de enfermedades altamente contagiosas. Acogieron a miles de críos que deambulaban por los barrios marginales de las grandes ciudades, en muchos casos sin escolarizar, al borde de la delincuencia, mal alimentados y víctimas propicias de todo tipo de enfermedades que, ante la falta de higiene prevención sanitaria, y medicinas, podían terminar por convertirse en plagas endémicas, como fue el caso de la tuberculosis en la década de los años cincuenta.
A la pérdida de cientos de miles de hombres en la guerra y durante la interminable posguerra, no podían permitir sumar la de la juventud, la infancia, que corría el riesgo de contagiarse de forma exponencial y cuyo tratamiento médico sí era caro, largo y costoso. De ahí la aparición de una red de sanatorios antituberculosos, la constitución de un Patronato bajo el lema de la cruz de Lorena, esa cruz roja de dos brazos de distinta longitud.
Pero hay que distinguir los Sanatorios antituberculosos, como era el de Guadarrama en Madrid, de los Preventorios, estos últimos eran lugares a los que se enviaba a niños sanos- no enfermos- en sucesivas expediciones para mantenerles durante unos meses- no hay acuerdo en la duración de la estancia, se habla de tres meses, de un año, incluso más- con el sólo propósito de tenerles bien alimentados, al aire libre y alejados de los focos de infección potencial de sus barrios y de las propias escuelas, donde se contagiaban unos a otros con suma facilidad.
Sólo conozco La Sabinosa y sólo de lo que conozco puedo hablar. Allí hubo malos tratos físicos y psíquicos a niños muy pequeños, hubo una alimentación seguramente abundante pero mal preparada y posiblemente de muy mala calidad. Es muy difícil de entender que niños que venían, en general, mal alimentados e incluso algunos pasando auténtica hambre en sus casas prefiriesen no comer cuando les ponían delante el plato arriesgándose a recibir un fuerte castigo físico. Algunos vomitaban la comida que ingerían atemorizados por el castigo, si no lo hacían, y alguno tuvo que comerse los vómitos, a guantazo limpio. Eso era así.
Se les abría el correo que recibían, y los paquetes (que guardaban las cuidadoras en sus habitaciones), se les censuraban las cartas que escribían a la familia, y se les mantenía durante horas sentados en la arena de la playa, o en el cercano monte con las rodillas levantadas y la cabeza entre ellas. Aunque la tal señora maestra que telefoneó al programa de Tv diga lo contrario. Jamás en el grupo que me tocó estar dieron un día de clase, jamás vi el aula de la maestra ocupada por niños, además resulta llamativo que, para seiscientos niños, hubiese una sola maestra, está claro que no podía hacer otra cosa que lo que hacía: leer libros o hacer manualidades y cuidar de sus uñas, muy rojas y bellísimas, según recuerdo.
Las cuidadoras eran personas seguramente sin la necesaria formación que hoy en día se exige para tratar con niños, no es de extrañar que, para controlar cada una a sus 20/30 «golfos», como nos llamaban, recurriesen a las palas de madera y a los silbatos metálicos para mantener la disciplina a golpes, y si lograban meter un poco de miedo en el cuerpo mejor, más dóciles se volvían las criaturas.
Las duchas colectivas con agua helada, la presencia de las cuidadoras en los wáteres y en las duchas hoy no se tolerarían. El trato a los “meones” sería intolerable, de juzgado de guardia. Así que las famosas colonias eran un lugar idílico, en cuanto a su emplazamiento, las familias incluso buscaban recomendaciones para que admitiesen a sus hijos por lo que era frecuente la convivencia de chavales del lumpen madrileño con casi señoritos del Madrid de los Austria. Los padres desconocían las condiciones reales en las que transcurrían las “vacaciones”, y el que los hijos se lo contasen a su regreso no servía de nada, no se les creía. Era otra época, qué duda cabe.
Por lo demás no había niños enfermos, no había desapariciones, torturas, misterios… nada que ver con la parapsicología, creo. Esta es mi versión, la versión de mis recuerdos dulcificados por la experiencia y el tiempo, eso sí.
Scila Klostenos/ 04/10/2012
Desde Redes del Misterio agradecer a Scila Klostenos su ayuda y colaboración aportando información veraz y de primera mano. Gracias amigo.
Nuestro pequeño homenaje a todos los niños que sufrieron maltratos en este mal llamado preventorio.
Como siempre amigos de la Ciencia, la historia y el Misterio, nosotros exponemos y vosotros opináis.
J.F. Redes del Misterio© Deposit number : DEP634327588309720000
vídeo de la investigación.
http://www.youtube.com/watch?v=MvR3n2enCMk
Fuentes consultadas:
Blog de scila: lasabinosa-scila.blogspot.com.es
Hemeroteca La vanguardia.com
Hemeroteca: Diaridetarragona.com
Enlaces para consultar:
http://lasabinosa-scila.blogspot.com.es/
http://www.diaridetarragona.com/tarragona/067957/el/preventorio/savinosa/
regimen/terror).
http://hemeroteca.lavanguardia.com/preview/1945/07/31/pagina-11/33085991/pdf.html
http://hemeroteca.lavanguardia.com/preview/1956/05/19/pagina-38/32767742/pdf.html
Fotografías:
Impresionante documento. Hoy estuve haciendo fotos de las ruinas de lo que pudo ser un hospital modelo si hubiese seguido el concepto DISPENSARIO MARINO de René Quinton , 1904. Mas información en . ? ? Qué saben de la escultura de EL MILAGRO al final de la playa situada en el jardín infantil?. Gracias
Yo he estado en tres ocasiones tres meses en cada ocasion yla verdad creo que no es para tanto la crueldad que he leido en el articulo aunque entiendo que eramos 600 chavales pero en ningun momento he visto esa dureza tan exagerada. Yo estuve los años 1954 1956 1957
Hola yo estuve en el año 1961 durante tres meses pase las navidades y el dia de reyes fuimos mi hermano y creo que cuatro o cinco chicos mas de mi barrio viviamos en la zona del Paseo de Extrmadura recuerdo el nombre de alguno de ellos como Tomas,Andres,Pedrito un chico que no podre olvidar nunca su ilusion era hacer un collar para su madre y recogia todas las caracolas pequeñas que encontraba para realizar su cometido era un chico delgado con gafas y con una cara de humildad que todavia hoy con mis 59 años le recuerdo como el primer dia me gustaria unirme algun grupo que estuvo en el Preventorio de la Savinosa en esa fecha
YO ESTUVE 5 VECES Y TODO ES MENTIRA
ESPEDICIONES LA 93-114-141-165 Y 190 NUNCA VI QUE PEGARAN A NADIE
Yo estuve dos años. Cada año tres meses. Desde Madrid íbamos en trenes, con las ventanas abiertas y pasando un frio espantoso durante toda la noche. Los que tenían suerte iban toda la noche sentados en los asientos, otros en las redes donde antes se dejaban las maletas y los que menos suerte tenían durmiendo en el suelo como me pasó a mí. Por supuesto sin nada con qué taparte. Temblando de frio toda la noche.
Por la mañana temprano teníamos gimnasia. El «profesor» nos hacía ponernos de rodillas en un suelo de guijarros que se te clavaban en las rodillas y al que se movía le llenaba de correazos para que todos aprendieramos lo que era el sufrimiento por Dios y por España. Por suuesto antes arriabamos la bandera cantando el cara al sol.
Dentro del pabellón donde yo estuve no había agua potable y nos acostubramos a beber agua de mar cuando teníamos sed. Sobre todo por las noches sin que se dieran cuenta las «cuidadoras» porque si te veían te molían a palos.
Esto es solo un comentario de las buenísimas vacaciones que pasé en la Sabinosa.
hola yo pase los tres meses navidades de 1961 y reyes de 1962 en compañía de mi hermano y un vecino de casa que se pasó por familiar nuestro para poder ir para nada fuimos engañados ni forzados fuimos por tener un padre que por desgracia contrajo la maldita tuberculosis muy frecuente en aquella época sobre todo en las clases más humildes y con escasos recursos es cierto que viajamos en trenes de madera y hacinados yo tuve suerte y me acople en un espacio que avía justo encima de la puerta y allí pase todo el viaje . el trato era disciplinario por supuesto y cada uno cuenta la feria según le fue nosotros no sufrimos un maltrato como muchos cuentan es cierto que miraban el correo y los pocos paquetes que nuestras madres con mucho sacrificio nos mandaban pero jamás nos quitaron nada escuchaban nuestras llamadas para conocer lo que decíamos en cada momento pero eso no era nada nuevo acaso en nuestras propias casas los porteros y algunos vecinos no ejercían de chivatos para el régimen y la policía pero si los propios serenos hacían esa labor que pensábamos que íbamos de vacaciones con gastos pagados era lo que era y no dudo que algunos lo pasaran mal pero no creo que hasta el extremo de compáralo con un campo de concentración o un correccional para nada es cierto que la comida era mala mucha sémola pero no falto el agua potable para beber quien en esa época de miseria podía permitirse algo mejor a muchos nos mandaron nuestras familias para aliviar un poco la carga que suponía alimentar a los hijos con un padre enfermo o en otros casos sin el cómo me sucedió a mí y sin apenas recursos económicos era una forma de alivio con relación al trato es cierto que avía abusos de poder pero no todo fue malo para mí fue la primera vez que vi el mar la primera vez que monte en tren la primera vez que conocí y aprendí lo que es el compañerismo y eso me servido el resto de mi vida como no conviene olvidar que estábamos en una dictadura horrorosa y en todos los sitios avía abusos de poder era muy corriente en esa época que un señor por llevar un simple uniforme pensara que podía hacer y deshacer a su antojo todo lo que le diera la gana pero si a un simple cura avía que besarle la mano cuando te cruzabas con él y en los colegios era normal que el maestro te pegara con una regla .que podías esperar de un lugar regido por monjas , curas ,un director adicto al régimen y señoritas solteronas y amargadas . Seguro que hubo de todo pero para mí lo tome como una experiencia de la vida y para nada me traumatizo ni me maltrataron todavía a día de hoy tengo en mi memoria el recuerdo de algunos niños con los que conviví y el regalo de reyes que me dieron una cámara de fotos de juguete que salía un gusano cuando la disparabas. Repito hay que tomarlo como una experiencia.
Me gustaría conocer a gente de aquel año si tienen fotos mejor un saludo para todos los savinosos.
Santi : no esta bueno que mientas , Yo estuve 2 años y nunca vi lo que estas diciendo.
Estaba ya cerrando el P.C. cuando ante mi vista he visto desfilar el reportaje que habeis realizado sobre el ¿Preventorio Antituberculoso de la Sabinosa- Tarragona?.
Y en su punto final he podido leer un Gran Piropo hacia el «Campo de Concentración de niños inocentes y llevados totalmente engañados a semejante y repugnante Campo de Penas,Agresiones e interminables llantos debido a las continuas y diarias agresiones a las que nos veiamos obligados a padecer, porque SI, por que a las Malditas y Diábolicas seños vestidas de inmaculado blanco, las salía de su entrepierna.
Todos y cada uno de los malditos dias, nos tenían acojonaditos, con amenazas de indole varia, como por ejemplo que aquel que siguiera portándose ¿ MAL ? al término del suplicio de los Tres interminables meses de permanencia allí, NO regresaríamos a nuestras casas, si no que un tren nos trasladaría hacia barna, y allí ingresaríamos en un recinto cerrado, sin limite de tiempo, por ser muy «Pendencieros y Cuatreros «, y en dicho recinto llamado, ¡¡ Correccional de Menores !! pasaríamos años internos.
Recuerdo que cada vez que oíamos pasar un tren, nuestros pequeños Didimos, se nos subían a la garganta, y pasabamos dia tras dia acojonadítos pensando en semejante amenaza.
Puedo explicar la forma en que eramos agredidos, Todos los Dias, y muchísimas anecdotas y traumas que de allí salieron esculpidos en mi mente de infante de escasos – 9 añitos – y que por muchos intentos que he llevado a cabo, morirán conmigo.
Y somos muchos los que podemos atestiguar la autentica verdad, mi mente por desgracia tiene regresión natural hasta los dos años de mi existencia, ( digo por desgracia, ya que se sufre mucho al ver perfectamente, al recordar perfectamente Todo lo que me tocó Sufrir, y mi deseo no es perder el tiempo en mentir, entre otras cosas, porque jamás he sabido hacerlo, y además es algo que odio.
así que si alguien desea que me extienda ampliamente que contacte conmigo, un afectuoso Saludo a todos.
Hola Manuel,
Me encantaría conocer tu historia vivida en la Savinosa con más detalle.
Soy de Tarragona, y quisiera conocer más sobre el pasado de este preventorio.
Un cordial saludo,
Neus
JAIME ARIAS CATALÁN, Octubre, 2014.
Yo estuve, como Aurrecoechea, los tres meses de verano del 56. No tuve ni vi malos tratos en ningún momento; aunque no dudo que los hubiera puesto que no creo que mientan quienes así lo afirman, pero según en qué casos y por qué personas. Bien se dice en el informe de investigación (muy bien hecho, por cierto) que en aquel tiempo y circunstancias era de uso común el ejercicio de una disciplina propia del glorioso régimen impuesto, pero recordemos que tal cuestión era de uso común en cualquier ámbito social. A mi, por ejemplo, me pegaron de firme en un colegio «de pago» en Madrid siendo un niño de los llamados «buenos y ejemplares».
Cómo me emociona leeros y saberos ahí, compañeros de La Sabinosa.
Lo primero que deseo hacer es agradecer con mucho cariño los comentarios referidos a la experiencias propias, algunas me han llegado hasta el corazón,
Yo no conocía nada de estos mal llamados Preventorios hasta hace unos meses, cuando me topé con un artículo de corte similar al de Redesdelmisterio y desde entonces recabo información acerca de los testimonios que allí se vivieron. Yo nací en 1982 en Madrid, por lo que por edad no he vivido situaciones de abuso o maltrato dentro de los centros escolares aunque sí recuerdo relatos muy duros de mi padre en centros religiosos en Ourense. Por ello quizá me interesan las distintas versiones de los hechos que vuestras mentes de niños recuerdan para poder tener así una idea general de como se vivieron los sucesos.
Si alguien desea contarme su historia con mas detalle estaría encantada, mi idea como escritora es llevar este tema a la literatura, no a modo de ensayo realista sino a encuadrar un relato en uno de estos preventorios y poder así denunciar todo el dolor sufrido por los pequeños.
Por último agradecer al blog el trabajo bien hecho con éste y otros muchos temas, un abrazo.
irenealonso@outlook.es
yo estuve en dos ocasiones durante tres meses cada viaje el primero en el verano de 1950 y el segundo en invierno de 1.951 acompañado de mi hermano.
Actualmente tengo 72 años y sigo traumatizado por aquellas experiencias aunque en los 10 últimos años ya no siento dolor y adversion por las palabras Sabinosa y Tarragona aunque tengo flax de imágenes de las viviencias de entonces.
Todo empezó porque un medico que trabajaba con mi madre (enfermera) le recomendó, en aquel tiempo, este lugar como sitio de recreo y de recuperación por el abandono de mi padre.
en ambas ocasiones fuimos en tren desde Madrid tirados en los pasillos y departamentos y dormíamos en los suelos, a partir de entonces comenzó un calvario.
No quiero extenderme pero son tantos los malos recuerdos, las humillaciones sufridas, los malos tratos y las indiferencias por parte de las personas mayores empezando por las encargadas de los grupos y terminando por los cuadros médicos y de la dirección.
Perdonar la extesion pero tengo tantas cosas (malas y menos malas) para poder contar que me faltaría espacio para relatar
Estuve en el 51 y 54 .con la Srita.Clara y Carmen.No sufrí malos tratos,comer se comía bien.Saliamos al monte todos los días .En el comedor vigilaba el Cicuta que si era duro.Se hacia algo de religión .En el 51 me pase un mes llorando por que echaba de menos a mi familia.Alli no lo pase mal creo que al contrario,tengo buenos recuerdos sobre todo el trabajo con las palmeras pequeñas y las visitas a Tarragona al fútbol y las visitas a las ruinas romanas.Lo malo del tren es ciertos,tardamos unas 20 horas llenos de carbonilla.Desde Reus ya se olía el mar.tengo 72 años y no se me olvidara en la vida .No dejaban que nos enseñaran catalán .
No todos han tenido la misma cuidadora, por lo que no podemos juzgar a unas o a otras, a mi me tocó de las peores por desgracia,recibí muchos golpes de alpargata, por cierto era de color azul, sin saber que mal había hecho, si un niño por la noche hablaba o reía en la cama, uno por uno recibíamos el cariño de la alpargata, recuerdo como si lo viviera ahora, despertarme con un golpe en la cara, a la cuidadora le tenía sin cuidado donde te daba. estuve en dos ocasiones los tres meses de verano. A mis padres les explicaba los malos tratos pero ni caso, Vuelta a pasar unas larguísimas ( vacaciones ).cuando volví desde Girona, el lugar de recogida era el Zoológico de Barcelona, allí nos esperaban las cuidadoras y allí estaba la misma del año anterior, por cierto me dijo,( hombre a ti te conozco ), me dió ganas de huir, correr, tirarme a los leones, al tren, todo pasó por mi cabeza, pero tocó resistir, llorar los golpes y esperar terminar las vacaciones para volver a casa, mis padres intentaron mandarme por tercera vez, pero les dije llorando gritando que si lo hacían me suicidaba , entonces me creyeron. Saludos
ENRIQUE lopez Santos, yo estuve en el 55 y tengo que decir que fue una experiencia muy buena /hay que tener en cuenta la e poca que era de la dictadura/.
Si Enrique estoy de acuerdo,todo y con dictadura no todas las cuidadoras eran crueles, por desgracia me tocó de las peores, saludos
Estuve en la Sabinosa 3 meses año 1957 hasta navidades.Acabo de reconocerme en las fotografias.
Mezclo recuerdos muy tristes con otros verdaderamente pateticos.
Cuando son las 5.17a.m. de la madrugada del Domingo 21/8/2016, estaba echando un vistazo a mi correo electr. y ¡ ZAS ! ante mi vista ha vuelto a desfilar el Maldito y Odiado Preventorio Antituberculoso para «tiernos infantes», los cuales supuestamente eramos alojados en dicho preventorio, con el «Noble y Loable» fin de alejarlos de su habitual entorno de residencia, junto al resto de sus familias, y por supuesto de sus Padres, ( sobre todo alejados del roce directo con las figuras Paternas, objetivo habitual de dicha enfermedad y con el meteorizado Bacilo de Koch.) Así ocurrió en todos y cada uno de los Preventorios Antituberculosos, que se implantaron a lo largo y ancho de la Geografía Española. – sic-
Me ha pillado en un momento en el cual digamos que estoy más «inspirado» y quizás sea debido a que mi moviola mental, esta madrugada está bien engrasada y en forma, debido a una serie de desagradables confrontaciones familiares, que me han elevado a flor de piel, los «Episodio Nacionales de mi historia particular «…..
Pero como soy consciente de que una vez se me destapa mi subconsciente, y comienzo a desatascar los conductos de mi historia, cegados – creo yo – por obra de mi cerebro, para no tener que sufrir en demasía, por la acumulación de tantas e injustas situaciones acaecidas en el devenir de los años, confieso sinceramente, – sin pecar de ser un personaje presuntuoso, que de eso nada – que me voy a extender unos cuantos renglones, los cuales van a resultar crudos y muy duros, pero os juro por las interminables lágrimas de pena que allí regué, que TODO LO QUE AQUÍ CUENTO ES 100×100 VERÏDICO Y AUTÉNTICO, Y QUE SI ME DEMOSTRÁIS UN MINIMO INTERES DE LECTURA, ME PONDRÉ MANOS A LA OBRA, Y RELATARÉ TODAS MIS VIVENCIAS, QUE POR MI «DESGRACIA» , AL TOCARME EN SUERTE UNA MENTE FOTOGRÁFICA, CONSERVO TODAVÍA HOY UNA GRAN PARTE DE MI EXPERIENCIA SOPORTADA. ( Aunque pienso que tampoco estaría mal, plasmar todo en un libro que sirviera como HOMENAJE, hacia todos y cada uno de los niños que por allí pasamos y sufrimos la Injusticia no merecida ni ganada.
Bien, yo salí junto al resto de la expedición que me tocó en «suerte», desde la Estación de Atocha, un dia entre semana, hacia media tarde, y eramos bastantes infantes, porque recuerdo el griterío y el murmullo de nerviosismo común, así como también los múltiples consejos y comentarios de nuestras madres, y por supuesto las rotundas y contundentes voces de las » Seños» encargadas de controlarnos y vigilar nuestro viaje hasta la estación de llegada del Tren a Tarragona, me retumban en mi mente sus peticiones dirigidas hacia nuestras madres, aconsejándolas que NO NOS DIERAN ALIMENTO ALGUNO PARA EL VIAJE, ( vamos que no nos entregaran la típica bolsita de tela con una cinta que servía para encerrar en su interior, el socorrido bocata de tortilla o similar ) porque repetían las «Seños manejantas» que una vez en marcha, ellas llevaban alimentos que nos darían como digamos cena o similar.
Pasaron las horas, y apareció ese gusanillo que reclama algo que llevarnos a la boca y que calme el hambre de toda ésa caterva de infantes, y la respuesta de las Seños, fué darnos un solo plátano por niño………… y a callar, porque comenzaron las amenazas de agresión Fisica.
Pero lo mejor de la larga noche subidos en un tren-tartana, estaba por llegar, y es que cual no sería nuestra sorpresa, cuando comenzamos a escuchar rumores y ver movimientos de chavales manejados con malos modos por las Seños-brujas, hasta que nos llegó a nuestro departamento, y es que nos obligaron a encogernos sobre el asiento de madera , adoptando la postura del nº 4, pero con la particularidad de que el primero que ocupaba plaza de ventana, debía de acoplar su cabeza en la figura del apoyabrazos, el siguiente-osea yo en mi caso -teníamos que adoptar la misma figura, utilizando de almohada la cadera de aquel que nos precedía, así hasta que entramos cuatro chavales, tumbados sobre el asiento de dura madera.
Aquellas posturas tan atípicas e incómodas, dieron como inmediato resultado, el inacabable comentario y advertencia-amenaza, de unos chavales almohada hacia otros, ya que comenzaron a bullir las tripas de todos, y a expeler aires con aroma a peste, a fosa pestilente, en fin que ciertamente daba la sospecha de que existía un determinado numero de chavales muy, pero que muy GUARROS, pero no fué exactamente éste el motivo, ocurría que debajo de los asientos del vagón nos habían recolocado a chavales tumbados en perpendicular a los dos bancos de cada dpto.y juntos unos con otros, así que también iban tumbados por los pasillos del Vagón, vamos que si hubiéramos sidos partícipes de una incursión al baño urgente, hubiéramos pateado y pisado a una incontable cantidad de chavales,…….. sonará penoso, patético,quizás hasta algunos creerán que me lo he inventado, pues NO, repito es absolutamente VERIDICO.
Y de semejante guisa ,hicimos acto de presencia en la Estación de Tarragona Ya seguiré, si es que me lo pedís, saludos a todos.
No hay que mezclar el centro con el personal que trabajaba en el mismo, son algunas de las cuidadoras las que hay que cuestionar, quizás las había humanas, otras verdaderas inhumanas, algunos de los que han estado allí han tenido mejor suerte, este no fué mi caso.Saludos
yo estuve junto ami hermano en las colonias del 65 meses sept a noviembre inclusive y si es verdad que si vomitabas la comida te la hacian comer de nuevo,lo mas malo que comi ear una sopa insipida,los famosos macarrones llamados mocos de elefante jaja y que decir de las cuidadoras habia una morena muy seria y mala y una rubia con mechas guapisima ami modo de ver de un niño de 7 años,en la enfermeria se estaba bien ami me cuidaron las monjas muy requetebien,al peluquero si que le traje por la calle de la amargura ja,ha y no te mearas que te ponian el cartel de meon y te paseaban por por todo el pabellon,la merienda ear pan con pasas o membrillo o con algo de matequila y el pan con chocolate jaja yo estube en el pabellon 10
angel melchor
Estuve en La Sabinosa en el año 1962, creo. Tengo muy buen recuerdo. Playa, monte, excursiones y comida 3 veces al día, lo que para mí era un lujo entonces. Duchas, asistencia médica… Jamás vi esos malos tratos de los que se habla, ni en mí (un bofetón merecido y algo excesivo una vez) ni en los demás.
Doy fe de que todo lo que se cuenta del preventorio de la savinosa es verdad,
entre otras barbaridades te hacian comerte la comida del suelo, te hacian cantar el cara al sol a la minima te daban con una regla en las uñas con los dedos juntos y otras muchas barbaridades que cuesta contar.saludos
yo estuve alla el año 65 parte de agosto septiembre octubre y algo de noviembre y dire que yo devolvia la comida,lo que mas la sopa eas que sabia a rayos almenos para mi en mas de 5 ocasiones la devolvi en el plato y me la hicieron comer,alos macarrones los llamabamos tubos,yo que jamas los habia comido la verdad no estaban malos,lo de ponerte en la espalda el soy un meon era tipico,de donde mejor recuerdos tengo es de la enfermeria,hice buenas migas con la madre que la dirigia,lo mejor era la playa cojer capuchinos caracolas,bueno os mando un saludo de un toledano residente en madrid,que estuvo en la sabinosa………….
Horrible el preventorio yo estuve en el 1960 al llegar mas te cogia Cicuta el peluquero te ponía una mano en el cuello y la frente pegada a la pared y te rapaba la cabeza dejándote un flequillo
La comida era mala y escasa los vasos y los platos de aluminio eran un asco se podía sacar con el dedo la mugre del fondo del vaso estaba
Estaba prohibido beber agua Llegamos a beber agua del mar de la sed que pasábamos, ami me dieron a comer Guindillas picantes sin poder Beber agua.
La mayoría eramos de Madrid de Barrios Marginados hijos de Rojos los dirigentes del preventorio con muy mala leche y La vara en la mano.
Cuando nos llevaban a misa estábamos toda la misa de rodillas en el suelo de grava.
Algunos niños lo pasaron muy mal la verdad es que nos desmontaban la moral
y la personalidad.solo nos enseñaban la mala leche que tenian los dirigentes
lo mejor eran los compañeros que nos ayudabamos. por eso sobreviviamos
era como una Carcel
La Labinosa me dejo Marcado